Una noche en la playa

Era uno noche de luna llena, creí por un momento poder alcanzar la luna si extendía mi mano al cielo. Caminábamos entre bromas y risas como tontos, corriendo por la playa como un par de locos; hasta que en un giro imprevisto caímos al suelo, quedando tendidos los dos en la arena, viéndonos las caras, viendo el reflejo de las estrellas en sus ojos. Fue un silencio que pareció eterno y a pesar de no decir nada, seguimos hablando con las miradas disfrutando del silencio y rugir de las olas.

Me acerque a ella y sentí como temblaba entre mis brazos, al igual que yo, los nervios nos delataron, un ligero rubor se percibió en su rostro, y bese sus labios mientras sentí su piel erizase, y un pulso eléctrico recorrió mi espina dorsal me recordó que era real, que estaba allí junto a ella.

Fuimos perdiendo el pudor entre besos y caricias, mientras nuestros cuerpos se conocían bajo el baño de plata de nuestra espectadora celestial; cuando mis manos en la penumbra supieron encontrarte y mis labios buscaban tu piel como un enjambre de mosquitos sedientos de ti, hasta empaparnos en un cóctel de ambrosía, sudor y arena, y con una orquesta de gemidos que le dieron a la noche un carácter divino.

Pero como siempre se escapo el momento, tan fugaz como una estrella y nuestra espía sigilosa se fue apagando ante el fulgurante amanecer que nos encontró tendidos y exhaustos en la arena. Y te fuiste de mi vida con la gente que camina, que se duermen con la luna y despiertan con el sol, para darme cuenta que solo fue un sueño y la noche ya paso.

Johnatan Moran
200607

Comentarios

Johnnattan Moran ha dicho que…
No es precisamente un poema, es mas bien un sueño que tuve hace algún tiempo, espero que les guste!
Me gusta tu trabajo, muy bueno.

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